Si vuelves la mirada atrás desde un tiempo a hoy día, es muy normal poder encontrar en la cartelera de cualquiera de nuestros cines alguna película relacionada con un determinado superhéroe.
Parece que es algo que está de moda en el Hollywood del siglo XXI, donde los productores y directores del momento han encontrado su nueva gallina de los huevos de oro, como es el caso de Disney, que por una oferta millonaria se hizo con la mayoría de los derechos de las películas de “La casa de las ideas” para poder explotarla a su libre antojo.
Pero sin duda, no se trata de una moda pasajera, pues ya anteriormente películas de bastante renombre marcaron hitos en la taquilla de todo el mundo; adaptaciones como superman con una recaudación mundial cercana a las trescientos millones de euros (algo bastante difícil en el momento de su proyección) y que permitió aprovechar su tirón alargando la historia hasta cinco partes, y el Batman de Burton con dos entregas magnánimas y una escalofriante cifra de 600 millones de dólares entre ambas, son ejemplos claros, que la gente tendía a tener una cierta devoción por estos hombres raramente uniformados.
Sin embargo es ahora, en este momento que nos ocupa, donde el cine superheroico esta marcando su mejor etapa, reproduciendo como mínimo tres películas sobre este género al año.
Entre estos personajes del celuloide podemos destacar películas como la trilogía de Spiderman, cuya ultima entrega se encuentra entre las diez películas mas taquilleras de la historia del cine, o la nueva franquicia de Batman del grandioso Christopher Nolan, una película que no solamente destaca por sus buenos números sino por rebosar de críticas positivas por la mayoría del publico y de la prensa. Ambas ya desarrollan las siguientes entregas, cerrando por una parte las nuevas aventuras del murciélago en una trilogía, mientras que por la otra, el lanza-redes favorito de New York se renueva y comienza una nueva saga. Las dos se estrenan en el próximo periodo estival esperando que sean de forma rotunda las dueñas de las taquillas de todo el mundo.
No podemos olvidar la ultima gran superproducción de Disney y Paramount, Los vengadores, donde se darán cita algunos de los roles mas importantes del cómics, y hoy día del cine de nuestra generación; Capitán América, Thor , Hulk; Iron Man…y que tienen en vilo a los fans de todo el planeta, incluyendo a mi mismo.
Pero, la pregunta a tratar es ¿Qué tienen estas cintas para atraer a tantísimo público, tanto infantil como adulto?
Cualquiera de estos personajes es, sin problemas de equivocarnos, el mayor reclamo en el mundo del cine para el público infantil. Lo que más destaca de este género es que no simplemente mueve al publico infantil, sino que las salas se llenan de espectadores de todas las edades, deseosos de ver a luchadores en malla cuya finalidad es combatir el mal y dar una lección moral al que la esta disfrutando.
Y es ahí donde esta el gancho, cualquier persona ha soñado alguna vez con poder volar, poder hacer de su vida una aventura épica donde lo sorprendente se convierta en pura rutina, donde cada momento sea una lucha constante por sobrevivir, y de poder continuar vivo y triunfante un día mas.
Cada historia, cada película, tiene una moraleja que no es más que un reflejo de la vida misma. Un superhéroe hace frente a un villano, y cuanto más duro y fuerte sea el villano, mas dura será la batalla a librar, acarreando con ello incluso perder la vida. Pero es ahí donde él se levanta, donde aunque solo le quede el últimos de su respiros logra alzarse, y con ello superarse y lograr vencer a aquel que le domina. Superarse, es uno de los ejemplos más claros, no rendirse, luchar aunque todo este perdido, esperanza.
Aunque suene absurdo, debemos comparar nuestras vidas con las suyas, nosotros puede que no luchemos con personas poderosas que quieren conquistar el mundo, no, nosotros luchamos contra nosotros mismos, sus poderes son nuestras responsabilidades, sus batallas, los golpes que la vida nos da día a día, y ¿por qué no? Si ellos son capaces de levantarse y seguir peleando, nosotros sin duda también lo somos.
En estos tiempos tan grises en los que nos encontramos, las salas de cine sirven como un soplo de aire nuevo, donde por unos momentos comprendes que nada en la vida está perdido, donde la pantalla pueda servirte de espejo y, reflejarte en uno de esos carismáticos hombrecillos que convierten lo imposible en posible , aunque claro, ello conlleve llevar mallas.
y estamos las que vamos a este tipo de peliculas arrastradas por algun amigo y terminamos encantadas con la pelicula aunque entramos a la fuerza.
ResponderEliminarun besazo.
P.D.hace mucho que no voy al cine